Las Gafas de Sara Llorens
Entrevista por Inés Matute
No son pocas las mujeres que tras la crisis que lleva zarandeando al país la friolera de seis años se han visto obligadas a reinventarse. Mujeres que quedaron en paro hace tiempo, que nunca llegaron a trabajar fuera de casa por atender a sus familias o mujeres que, simplemente, por el hecho de haber sobrepasado la barrera de los 45- sí, hay vida inteligente más allá de los 45, lo confirmamos- quedan aparentemente fuera del mercado de trabajo. No hablamos de mujeres sin preparación y sin empuje, sino de gente sobradamente preparada, con experiencia en diversos campos que, por causas totalmente ajenas a ellas, se han visto marginadas o expulsadas del mercado laboral. Contra su voluntad. Contra toda lógica. Víctimas de la crisis.
Comenzamos hoy una sección que pretende ponerles cara y haceros partícipes de su experiencia; de cómo pasaron de verse "out" a convertirse en emprendedoras, autónomas, empresarias corajudas, en fin. Sara LLoréns abre este mes la sección.
Si queréis visitar su web, y haceros con sus preciosas gafas, sólo tenéis que clickar aquí:
Sara, ¿en qué momento decidiste dejar atrás todo lo que habías hecho antes y probar con algo nuevo en lo que no tenías ninguna experiencia? ¿Qué fue lo que detonó en click en tu cabeza?
Inquieta es la palabra que me define. Para lo bueno y para lo malo. Siempre me ha gustado variar, hacer cosas nuevas, ir más allá, con prudencia, claro. Por ese motivo dejé de trabajar en empresas privadas, porque siempre encuentras un Jefe o Jefa que te corta las alas. Trabajé en el mundo de la moda en una empresa familiar y finalmente me ofrecieron la oportunidad de representar a una marca francesa en España y me instalé por mi cuenta. Una sufrida autónoma de 34 años. “Marketiniana” de formación, con idiomas (francés e inglés) y con ciertas dotes sociales, ese trabajo era perfecto. Aprovechamos el boom de la fabricación en China, así que conseguí abrir mercado en España en cadenas como Zara, Hipercor, El Corte Inglés, Benetton… Fueron años muy duros (abrir mercado en puerta fría lo es) y muy buenos, económicamente hablando. Luego el mercado se saturó. Mi proveedor se dedicó a otras cosas y yo me quedé sin trabajo. A partir de los 40, para el mercado laboral eres poco menos que un gran dinosaurio. En ese momento pasó uno de los trenes de mi vida, esos a los que hay que subirse sí o sí.Me ofrecieron participar activamente en un partido político que se presentaba por primera vez en Madrid a las elecciones municipales. Codo con codo con un equipo de gente y trabajando como asistente/jefe de gabinete del candidato por Madrid viví una de las aventuras más excepcionales y alucinantes de mi vida. Te das cuenta de la cantidad de cosas que puedes intentar cambiar, de la cantidad de iniciativas que puedes promover, de que realmente puedes poner tu granito de arena para cambiar el mundo.¡Semejante subidón de adrenalina no te lo proporciona ni un salto al vacío! Cuando te enfrentas a la realidad el batacazo es tremendo. Pero aprendí dos cosas que han marcado y marcarán el resto de mi vida:
1 Que los ciudadanos de a pie vivimos en un mundo de “yuppi” ajenos a todo aunque, sin embargo, tenemos un poder excepcional si queremos utilizarlo.
2 Que si había sido capaz de realizar semejante hazaña sería capaz de hacer cualquier otra cosa en mi vida.
Como ya llevaba muchos años queriendo tener mi propia empresa, decidí ponerme manos a la obra.
¿Cómo se te ocurrió la idea de ponerte a diseñar gafas? Tenías experiencia previa, te ayudó alguien?
Mi madre tenía una empresa mayorista de bisutería y accesorios que importaba de Francia. A pesar de haber trabajado en la empresa privada siempre he colaborado con ella en ferias y de forma puntual. También pasé un par de años trabajando en la empresa familiar hasta que me instalé como autónomo por mi cuenta. La moda tiene una cara creativa y muy divertida en la que me encanta sumergirme. Yo tengo los ojos claros y siempre llevo gafas de sol, la luz me molesta mucho y nunca he entendido por qué las gafas no se consideran un accesorio que puedes combinar con ropa o con otros complementos. Reconozco que “lo de siempre” me aburre. El mismo día puede ser muy diferente aunque realices las mismas acciones, siempre y cuando tú seas proactivo y tengas espíritu positivo o alegre. ¿Por qué elegir siempre las mismas gafas de pasta marrón o negra? ¿Por qué no llevar las gafas a juego con mi collar, mi fular, mi pulsera o mis pendientes? Me gusta la idea de adaptar mi forma de vestir a mi espíritu o incluso de cambiar mi ánimo negativo vistiendo accesorios alegres.
Ponerte en el lugar de todas esas mujeres y diseñar gafas es como ser actriz, pero en la sombra. Perfecto para mujeres tímidas como yo. Después de mi paso por el mundo de la política pero con la seguridad de que en esta vida puedes hacer lo que te propongas, me lancé a hacer una actividad que me encantaba y convencida de que había un hueco de mercado para unas gafas distintas para una mujer distinta. Unas gafas fabricadas en España, con unas lentes polarizadas de la mejor calidad, con acetato italiano y telas alegres y divertidas y además, preciosas. Puedo combinarlas a juego con todos mis accesorios: fular, pulsera, pendientes o colgante. Quien sabe qué otros complementos nos deparará el futuro…
Quienes me han ayudadohan puesto en ello el corazón y el alma. Gente a la que las ideas nuevas le gustan y apoya cualquier iniciativa que tome un amigo. Gente que me ha animado y me ha ayudado a hacer páginas web, videos, hojas de Excel, previsiones económicas, ajustes de precios, negociaciones con proveedores…mil cosas. Tengo “amigos” excepcionalmente generosos.
¿Cómo te pusiste en marcha, con quién contactaste, fue una andadura difícil?
En este País cuando vas a emprender lo primero que te llaman es loco, así que partes de la base de que vas a conocer a Tom Cruise en una Misión Imposible. Yo no voy a engañar a nadie, en España no emprendes si no tienes algo que dar a los bancos. Y lo tienes feo si no tienes unos mínimos conocimientos de economía y mucha lucidez para leer los millones de documentos con letra más grande y con letra muy pequeña. No es fácil, pero no es imposible. Me recuerda un poco a las “12 pruebas de Asterix”, dónde para conseguir el papelito azul primero debías tener el verde, pero para obtener el verde debías presentar el amarillo. Sería más fácil si todo se simplificara mucho más para los nuevos emprendedores. Pero insisto, “Deja de pensar en términos de limitaciones yempieza a pensar en términos de posibilidades”. (Ferry Josephson).
Háblanos del proceso de producción del producto, de las trabas que encontraste, de la financiación, etc.
Desde el comienzo tuve el empeño de que estas gafas estuvieran fabricadas en España. Primero porque son un producto de lujo, es la verdad, y un producto de lujo necesitaba de unos cuidados y una fabricación de lujo. Me llevó un año y medio encontrar la fábrica y las personas adecuadas para fabricarlas (principalmente porque hacer las gafas es difícil y artesanal).Primero elegimos las telas para la colección y hacemos las pruebas con el acetato. No todas las telas quedan perfectas y la elección de los colores de los acetatos es crucial.Seleccionamos los modelos de gafas que vamos a fabricar y encargamos las primeras muestras. Una vez aceptadas empieza el proceso de producción y finalmente el de secado. Uno de los momentos más importantes. El secado lleva mucho tiempo y no puedes sucumbir a la tentación de saltarte esa etapa. Las gafas carecerían de calidad.
Trabas encuentras a millones, así que tienes que tener una buena dosis de creatividad para superarlas. Cuando las cosas son difíciles te sorprendes a ti mismo de las soluciones que se te ocurren. Encuentras trabas burocráticas, financieras (hay subvenciones pero no dinero) y trabas sociales (en cualquier otro País de Europa los emprendedores somos muy apreciados , en nuestro país la gente te recibe con muchas reticencias cuando estás empezando). Pero tienes que ser capaz de afrontar los problemas y la pasión por lo que haces tiene que ser tu llave para encontrar las soluciones.
Cuéntanos cómo distribuyes o cómo están siendo aceptadas las gafas y los preciosos complementos que las acompañan.
Cuando careces de dinero para invertir en publicidad tienes que suplirlo con tu encanto natural haciendo actividad comercial en puerta fría. Quien se dedique a ello sabe que hay días en los que al llegar a casa te apetece hacer un agujero en el salón, meter la cabeza y tapar el hueco. Me empeñé en desarrollar varios frentes: Particulares (página web), ópticas nacionales y ventas fuera de España. Internet es increíble. Te permite contactar con otros diseñadores, tiendas en Europa o en el resto del mundo.
Volviendo a la tierra, paso a paso, poco a poco, mucho trabajo, mucho tesón, mucha creatividad y muchas horas de tu vida es lo que permite lograr el éxito en tu empeño. Pero es curioso que las gafas se han vendido a personas (ya sean particulares u ópticas o tiendas) con una visión de la vida muy parecida a la mía: positiva, esperanzada, luchadora y diferente.
Si conocéis a alguna mujer como Sara LLoréns, contactad con Agitadoras.com y os contaremos su aventura. ¡Así las ayudaremos a ser más visibles y....quizás nos animemos a montar nuestra propia empresa!