Quiero comenzar felicitando a José María por hacer llegar a los lectores un libro, bajo mi criterio, totalmente distinto a lo que normalmente estamos acostumbrados.
Al abrirlo observamos, al recorrer sus páginas en una ojeada, que la redacción de los capítulos es peculiar ya que al final de cada uno de ellos nos pide, el autor, que lo valoremos del 1 al 10, excepto el décimo quinto, el más íntimo y personal de todos. Nos llevamos sorpresas en un par de ellos al albergar sendos códigos QR para completar y ampliar información.
Me llevo una sorpresa al no poder clasificar la obra en ningún género concreto, y algo llevo leído y reseñado. Me atrevo a decir que es un conjunto de ensayos, ensayos muy personales confesados al público lector con el que establece un diálogo íntimo y sincero -propongo tertulias para debatir sobre cada uno de los capítulos-. La redacción es muy clara y diáfana; con un gran número de notas, a pie de páginas, y aclaraciones.
Fundamentalmente son opiniones muy profesionales sobre marketing -que se podrían incorporar a las facultades de Administración y Dirección de Empresas- muy didácticas. Me paro en dos capítulos: el quinto “Lost in translation”, por su mezcla de español e inglés (buen juego de palabras) y el noveno “El marketing no gobierna”, muy claro y lo hago totalmente mío.
Insuperable, íntimo y muy personal el capítulo quince “Solo hazlo”. Cuando lo lean, entenderán perfectamente porqué queda fuera de la puntuación requerida en los demás.
En fin, un paseo por el interior del autor y sus gustos musicales, fílmicos y literarios. Paseo que a más de uno nos llevan a tener el ejemplar muy cerca de nosotros, de cabecera, para, en algún momento, hacer una consulta o recordar algo.
Termino presentando mis respetos al amigo Donate por atreverse, por primera vez creo, con algo que no es nada fácil, escribir para un público, y salir de él más fuerte y respetado.
Les dejo con las propias palabras de José María Donate García:
«RESUMIR UN LIBRO EN POCO MÁS DE 200 PALABRAS es casi tan difícil como escribirlo. De estas líneas dependerá que tú decidas saber más acerca del contenido de esta gran historia. Todo comienza con una pregunta, ¿por qué soy lo que soy?, para después adentrarnos y explorar la primera conexión que todo ser humano lleva incorporada de serie.
Todos tenemos un ombligo, y esta novela lo sitúa de nuevo en el centro. Si tuviera que definirla, te diría que es una ciencia ficción muy real, pero también un musical, un ensayo sobre la vida y hasta un manual sin instrucciones ni recetas mágicas, pero sí con muchas pistas.
Seguro que te preguntarás si es esa típica lectura de autoayuda. Mi respuesta es clara y sincera: «Cualquier libro te ayudará a ser mejor persona y esta obra no es una excepción».
Es mi primera novela y tenía claro que era exactamente lo que quería escribir. Te ofrezco un excelente menú literario con dieciséis capítulos, alguna que otra sorpresa y un gran final…, que será mejor que lo descubras tú mismo o tú misma.
Los protagonistas son el marketing —no importa que no tengas conocimientos en esta disciplina—, un servidor —tampoco es imprescindible que me conozcas— y tú —seguro que acabaremos conociéndonos—.
Si eres de los que creen que la vida puede ser maravillosa, aunque a veces te golpee duramente, este es tu libro y la «ombligonoscopia» habrá merecido la pena».
José María Donate García (Donate_JM) (Valle de Escombreras, Cartagena, 1979)
Hijo, hermano, esposo, padre y profesional del marketing.
Me encanta mi profesión y también ayudar a la gente, así que no les aburriré mucho relatando mi biografía. Simplemente les diré que profesionalmente llevo más de dos décadas inculcando los buenos valores del marketing y toda una vida tratando ser una mejor persona.
A través de mis redes sociales, @DonateJm, y mi perfil de Linkedin podrán conocer más aspectos sobre mí.
Me estreno como escritor con mi primera novela: ‘Somewhere in my “ombligo”’ (2022), con la ilusión de aquel niño introvertido, pero a la vez muy curioso, que pasaba las horas muertas imaginando historias y soñando con que, algún día, alguna se hiciera realidad. Muchos años después, se cumple esa ilusión de la infancia y escribo el libro con el que siempre quise debutar. Ha sido fácil porque llevaba muchos años en mi cabeza, pero, por extrañas razones, se había refugiado en mi ombligo.
No dejen de leer, de soñar, de aprender y de querer vivir.
José María Donate García comparte su ombligo con todos los seguidores de ‘Agitadoras’… Gracias…
P.- Por favor presente a José María Donate García.
R.- José María es el menor de cuatro hermanos. Hijo de Maruja y José María. Esposo de Carmen María y padre de Claudia y Emma. Nacido y “espumado” en el Valle de Escombreras, ese maravilloso lugar que un día fue, pero que ya no está.
Es diplomado en ciencias empresariales, licenciado en investigación y técnicas de mercado y “marketiniano” de profesión.
Desde hace más de dos décadas lleva inculcando los buenos valores del marketing hasta convertirlo en su filosofía de vida.
Ha vencido su timidez mostrándose tal cual es, subiéndose a los escenarios para presentarnos su gran aportación a la vida, la “Ombligonoscopia”.
P.- ¿Desde cuándo escribe y por qué?
R.- He escrito toda mi vida, desde pequeñito. Otra cosa es que lo publicara o lo contara. Siempre he sido una persona tímida e introvertida y quizás me daba vergüenza exponerme y que mis amigos, familiares u otras personas leyeran lo que yo escribía. Pero eso ya pasó. Me he dado cuenta que escribir me gusta y me hace muy feliz compartirlo.
Cuando era un niño, no leía demasiado, pero sí escribía muchas historias. Eran más bien guiones para personajes que habitaban en mi imaginación. Con el paso de los años me convertí en un gran lector y siempre pensaba que algún día, yo podría contar mi propio relato. Ahora que ya he sobrepasado la cuarentena, creo que es el momento perfecto para hacer algo nuevo. Tengo la madurez y he vivido suficientes cosas para hacerlo realidad y ojalá el lector lo disfrute tanto como yo al escribirlo.
P.- ¿Cuándo, cómo y por qué nace 'Somewhere in my "ombligo"' ?
R.- Empezaré por el “por qué”. Escribí ‘Somewhere in my “ombligo”’ para responder a la inocente, pero certera pregunta de Emma, mi hija pequeña. Sentí la necesidad de explicar “por qué soy de marketing”. Busqué un lugar cómodo para contar mi historia y desde lo más profundo de mi ombligo me puse manos a la obra.
Con respecto al “cuándo”, comencé a escribirla en la primavera del 2021, cuando el Covid ocupaba gran parte de nuestros pensamientos e íbamos de ola en ola evitando contagios y rezando para que nos inocularan con la vacuna de la marca buena.
El “cómo” tuvo como punto de partida una estructura inicial de libro, alojada en mi cabeza y que un buen día, se plasmó en papel. Una vez focalizada la idea y esbozada la distribución en capítulos cortos, pero de lenta digestión, comenzó a cobrar vida y a fluir el texto.
P.- ¿Cuánto tiempo tardó en escribirla?
R.- Curiosamente lo mismo que un embarazo y además es un símil muy acertado para describir todo el proceso creativo hasta que la obra queda terminada. Podría decirse que la “fecundación” tuvo lugar en mayo de 2021 y el “parto” en marzo de 2022. Ambas fechas coincidieron con dos momentos históricos, de distinta naturaleza, como fue el campeonato de liga ganado por el Atlético de Madrid y los primeros días de la invasión de Rusia a Ucrania.
Luego llegaría el “postparto” que también es una etapa crítica y dura. Aquí también transcurrieron otros nueve meses hasta que el proyecto se materializó en libro físico. ¡Toda una aventura!
P.- ¿Es todo producto de su imaginación o hay alguna documentación?
R.- Hay mucha realidad y rigor en lo que he escrito. Toda la información y datos aportados proceden de fuentes solventes y han sido contrastadas. Mi opinión personal está muy presente durante toda la obra, porque mantengo un diálogo permanente con el lector. La ficción surge de esa cercanía y ambiente distendido. Por eso me permito la licencia de “llamar a filas” a personajes famosos, ponerme en su piel, establecer diálogos con ellos y dejar volar la imaginación. Al fin y al cabo, se trata de una “ciencia ficción muy real” y la vida es la mejor fuente de inspiración.
P.- El título y la portada, son ideas ¿de...?
R.- El título es 100% idea propia (de la factoría Donate como dirían mis amigos). Desde el primer momento lo tuve claro y cuando puse negro sobre blanco la estructura del libro, lo bauticé con este nombre. Eso es una gran ventaja porque le coges mucho cariño a tu proyecto desde el principio y esa ilusión nunca te abandona. Mantuve en secreto el título hasta el último momento porque sabía que daría que hablar.
¿Por qué le puse este título? Porque soy de marketing y sé que un título ha de sorprenderte, llamarte la atención y despertar tu curiosidad. Por supuesto debe estar relacionado con el contenido y si es posible, preocuparse por algo que pasa desapercibido y está alejado de todo foco mediático. Al fin y al cabo, a todos nos encanta descubrir “tesoros” y el ombligo da mucho de sí.
La portada es obra de mi gran amigo Luis Vilches (Senior Art Director en Ogilvy) -soy una persona afortunada-. Luis es mi mejor amigo, yo le llamo “hermanico”, nos conocemos desde que tenemos 10 años, pero vive en Estados Unidos porque es un genio del diseño y en España estaría condenado a malvivir. Así que le pedí dos favores. Primero que leyera el libro antes de publicarlo y después que me diseñara la portada en base a lo que él había percibido tras su lectura. El resultado es una autentica maravilla, bajo mi punto de vista. Esa obra tiene nombre, se llama “Vericueto” y expresa nuestro viaje por la vida. Esos trazos irregulares a mano alzada donde no hay líneas rectas sino camino recorrido, con muchas paradas y lugares con encanto.
En la contraportada hay otro tesoro. Es la fotografía al autor realizada por mi hija mayor, Claudia. Es otra obra de arte porque a mí no me gusta nunca verme en fotos, pero esa me encanta porque me veo retratado en ella y Claudia ha sabido captar toda mi esencia en una fracción de tiempo inmortalizada en papel.
P.- ¿Qué importancia le da el "mirarse el ombligo" de vez en cuando?
R.- ¡Muchíiiiiiiisima! (risas). Hasta tal punto que la he situado en el centro de mi novela. El ombligo es el protagonista. Lo he “rescatado” de su olvido para darle la importancia que realmente merece. Es, sin lugar a dudas, nuestra primera conexión con el mundo mientras nos vamos formando en ese “universo placentario”. Después nos deja una marca imborrable en el centro de nuestro cuerpo y nosotros le pagamos con la indiferencia. Eso no puede ser. Debemos mirarnos más el ombligo y adentrarnos para pensar más, hablar menos y actuar con coherencia y sentido común. Es lo que he aprendido tras mucha “prospección umbilical”.
P.- ¿Tiene algún referente literario?
R.- Muchísimos porque me gusta mucho leer. Creo que todo gran lector es un escritor en potencia y solo hace falta ponerse a ello.
Me pasa lo mismo que con la música. Tengo muchísimo respeto por los autores y sus estilos. De Pachebel a Extremoduro y en literatura de Sun Tzu a Arturo Pérez- Reverte (por citar a un paisano ilustre)
P.- ¿Cuáles son sus géneros y autores favoritos?
R.- En mi adolescencia devoré todas las obras de Miguel Delibes. Recuerdo esos momentos con gran cariño.
Descubrí la novela histórica de ficción, posiblemente mi género favorito, a través de Noah Gordon y su maravillosa trilogía sobre El Médico.
No me olvidaría de los grandes clásicos con Cervantes a la cabeza, bien flanqueado por Lope de Vega y Quevedo (el que escribe, no el que canta).
P.- Como lector, prefiere ¿libro electrónico, papel o audio libro? ¿Qué está leyendo en este momento?
R.- Como preferir, sin duda me quedo con el libro en papel. Disfruto con el tacto. Me encanta el olor de los libros y me gusta pensar que será un legado que otros podrán seguir disfrutando. He de reconocer que también soy lector de libro electrónico, principalmente por comodidad y por ahorro de espacio. Ambas opciones son válidas para satisfacer nuestra necesidad de leer.
Por el momento no soy de audio libro, aunque creo que tiene muchas cosas buenas. No debería sustituir a nadie sino complementar la oferta. Al fin al cabo, se ha demostrado que las nuevas generaciones pueden hacer muchas más tareas a la vez. ¡Cosas de la evolución!
Actualmente estoy leyendo la última obra de Ignacio Borgoñós, amigo y también vecino de El Valle de Escombreras. Se titula “Un hombre desnudo” y tiene muy buena pinta.
P- Recomiende un par de títulos, por favor.
R.- Me encanta la forma de escribir de Julia Navarro y su forma de abordar problemas tan actuales como el integrismo islámico o el conflicto entre palestinos e israelíes. Recomiendo leer sus obras: “La sangre de los inocentes” y “Dispara, yo ya estoy muerto”.
Por citar otra obra y autor, recomendaría leer o releer “Rebelión en la granja” de George Orwell. Muchos la conocerán porque es una obra de 1945, pero a pesar de ello es plenamente actual y más en año electoral. Les aseguro que podrán asociar a muchos personajes públicos con los animales de esa peculiar granja. Queda de manifiesto que las “disrupción” no la hemos inventado nosotros.
P.- ¿Qué manías tiene a la hora de escribir?
R.- Más que manías, le llamaría anécdotas porque no soy una persona maniática.
Me gusta escribir de puño y letra la estructura del libro porque es una manera de focalizar lo que hago. El papel siempre fija la atención.
Uso portátil para escribir, porque cualquier momento es bueno para hacerlo y necesito tener siempre a punto la herramienta. Si viene la inspiración y me pilla sin portátil siempre está a mano el móvil para grabar audios o escribir notas de texto.
Cuando estoy escribiendo, mi cara es muy expresiva. Hago muecas, muevo labios como si estuviera rezando y hablo mucho para mí. Tecleo con fuerza, como si apretara el bolígrafo, porque siento que las ideas van más rápido que mis dedos y eso que escribo deprisa (soy afortunado por ello).
No necesito aislarme para escribir. Me gusta poder hacerlo en lugares públicos y por supuesto en casa y con mi familia, donde puede haber interrupciones, porque así es el directo.
Por último, tengo varias copias de seguridad en distintos dispositivos, porque no me gustaría que me pasara como al despistado personaje de la película “Love actually”, que usaba máquina de escribir, no hacía copias y sujetaba su obra con una piedra mientras escribía al aire libre. A veces, esa tecnología falla, la piedra se desplaza y los papeles vuelan. Más vale varios usb en mano.
P..- Venda su libro ¿por qué hay que leer 'Somewhere in my "ombligo"' ?
R.-¿Cuánto tiempo/espacio tengo para convencer al lector? (risas). Bromas aparte, la respuesta más sincera y directa es: porque te sorprenderá y hoy en día es muy difícil que algo nos sorprenda.
Para mí es todo un reto responder a la pregunta, ¿de qué va tu libro? No es fácil, porque resumir qué es la vida, es algo reservado a grandes genios y obviamente no es mi caso.
En mi modesta opinión, es un libro original, fácil de leer, entretenido y jodidamente sincero. Es una radiografía muy personal en la que pueden verse reflejadas muchas personas. He querido darle protagonismo al marketing porque es mi profesión y mi filosofía de vida, pero también es un alegato por todo aquello que no siempre valoramos y que siempre está ahí, por eso he querido representarlo a través del ombligo.
Es un viaje vital lleno de vericuetos sin un orden establecido, pero con hilo conductor desde inicio hasta fin.
Gracias a la magia de la literatura, he podido convivir con personajes históricos y otros dioses humanos a los que profeso mi particular fe. El resultado es una ciencia ficción muy real llena de sorpresas.
La novela cuenta con un gran equipamiento de serie. Dispone de suficientes puertas y ventanas, excelente acústica y una magnífica música de ambiente.
En definitiva, aporta valor y cunde mucho más de lo que cuesta.
P.- ¿Por qué destinan el producto de las ventas del libro a "Autismo somos todos"?
R.- Lo explico en el libro. Lo hago principalmente por agradecimiento y por coherencia.
El ombligo siempre es solidario y quiere ayudar a colectivos que lo necesitan. Todos somos conscientes de que hay muchas necesidades, pero eso no debe ser una excusa para la inacción.
La primera “Ombligonoscopia” practicada, que se celebró el pasado 10 de febrero en Cartagena, fue a beneficio de “Autismo Somos Todos”. Nadie lo sabía, excepto ese magnífico equipo de voluntarios que me acompañó y los miembros de la junta directiva de la asociación, a los que les presenté mi idea y me permitieron contar con su ayuda. No lo anuncié en los carteles y tampoco quería que la gente que viniera a la presentación lo hiciera condicionada a nada. Todo fue un regalo. En ningún momento me preguntaron cuánto se les iba a donar. Mi respuesta fue regalarles el importe íntegro de todos los libros vendidos el día de la Ombligonoscopia. El principal regalo no fue el dinero recaudado, eso es solo una cifra, lo importante fue dar visibilidad al Autismo en la vida adulta. Mostrar que están ahí y lo hacen muy bien. Me siento especialmente orgulloso de cómo fue todo y guardaré siempre esa experiencia imborrable. Si algo te llena, simplemente hazlo.
He de aclarar, porque no quiero que nadie se lleve a engaño, que no es un libro benéfico ni tampoco subvencionado. Este proyecto es de autoedición, es decir yo como autor lo he costeado de principio a fin, sin ningún tipo de ayuda o ‘esponsorización’. Por lo tanto, no puedo donar íntegramente todo lo que perciba por su venta. He de decirles que no tengo apego al dinero y me gusta compartir con aquellas personas y entidades que son honestas. Mis amigos de Autismo Somos Todos lo son y habrá más acciones porque está en el ADN de esta obra.
P.- Sus planes a corto y medio plazo ¿son?
R.- Disfrutar de mi familia, de la vida y del crecimiento de esta novela que tantas satisfacciones personales me está dando.
Quiero centrarme en disfrutar cada paso porque todo es nuevo. Ya he vivido mi primera firma de libros y mi primera “Ombligonoscopia” (presentación), pero todavía queda mucho camino. Espero que esta obra me lleve a conocer muchos sitios, salgamos de la Región para interactuar con otros ombligos y se cumplan algunos deseos confesables como, por ejemplo, ser entrevistado por Julia Otero (de ilusión también se vive).
Tengo previsto seguir escribiendo. Mi idea es “volver al gimnasio” a partir de mayo y empezar a dar vida a una historia que se va asentando en mi cabeza. Todavía no ha pasado al papel, pero tiene buena pinta. Será distinto a ‘Somewhere in my “ombligo”’ pero habrá mucho sentimiento, mucha vida y muchas sorpresas. No me marco un plazo de ejecución ni ninguna presión. Simplemente quiero seguir siendo feliz escribiendo y que los lectores también lo sean cuando recorran sus páginas.