Cambiando el registro ultraviolento y bronco de la fantástica Old boy (y sus hermanas Sympathy for Lady Vengeance y Sympathy for Mr. Vengeance, que completan la llamada Trilogía de la venganza), el coreano Park Chan-Wook dirigió en el año 2006 Soy un cyborg (I am a Cyborg, but that´s ok), un film poético e inclasificable, a caballo entre varios géneros, surrealista, emotivo y psicoanalítico puro cine de autor moderno, que os recomiendo muy encarecidamente videar.
Una elegante historia de amor bizarro, llena de visionarias secuencias y entrañables detalles, con una puesta en escena, una fotografía y un guión para quitarse el sombrero, que arranca al espectador más de una sonrisa cómplice y le reconcilia con la humanidad, el cine y el mundo.
Todos, en esta sociedad alienante y robotizada en que vivimos, nos hemos sentido alguna vez cyborgs, como la protagonista de la película (que, en su paranoia, se alimenta exclusivamente de pilas), y hemos sido reconfortados milagrosamente por algún alma gemela.
De todo ello y más nos habla, con el lenguaje universal e infalible del corazón, Park Chan-Wook en Soy un cyborg, solaz y alimento para el espíritu y delicia para los cinco sentidos.
Inteligente, hipnótica e imprescindible en mi videoteca.
Trailer in You Tube
http://www.youtube.com/watch?v=Olc2tZcK7Sw