…y la imago le reverberaba en los ojos
y se abría en mil compuertas dándole paso a las aguas de espejos.
José Lezama Lima (Oppiano Licario)
Desde el yin el yang
y (por qué no) el yung
así nomás sin jota de alarife torneado
vamos dándonos alas para surtir milagros:
en qué escuela de vírgenes
me topé las imágenes tópicas
que ya no dicen nada
pero de sólo intuirlas me arrebatan
las muy tácitas
las apenas de orilla emancipadas
las imprecisas que en su punta de lengua
se adelgazan al punto de no poder ondear
su cáscara lunosa
La imagen es así
me dicen
muda de genes que pretendan caer
en el lenguaje
Discrepante
No enunciada siempre
Nunca verbo
La imagen redunda en la latencia
o no la es tal
Lo que se dice no es lo que se sueña
ni lo que se imagina
ni lo que se libera en parpadeos
La palabra es
(para la imagen)
si acaso
una pica sin lanza
sin más sonido más
sin más presagio
que su presencia sola
solícita
en su ademán de sombra
a penas soterrada:
al llegar a su blanco reverbera
Pero el mar
pero la luna
pero el viento y sus árboles nomónicos
pero la madriguera de los dones
pero la imaginante fantasía
son una casa enorme
que sólo cabe en sí:
y eso que se desborda es el lenguaje
no el yin ni el yang
Acaso el yung
con jota
de alarife torneado y sicoanálisis
{{{En trámite ya de ser verdad
la imagen retorna
indefectiblemente
a su máscara primera}.
