How to Be Parisian Wherever you Are
Valentina Lloréns
Autora:
Caroline de Maigret & 3 más. Double Day. 2014..
Hace dos semanas, y con la ilusión de quien abre el primer regalo de Navidad, empecé a leer el libro que me prestó una amiga, "How to be a parisian wherever you are". Con un diseño cuidado, una ilustración estilosa y una etiqueta escondida que por descuido me permitió descubrir el precio del artefacto (25 euros del ala), mi mente se lanzó a especular con lo que dicho libro me aportaría; sus páginas serían una auténtica guía de cómo ser una glamourosa parisina pese a haber nacido en una isla y no haber visto la Torre Eiffel más que en películas románticas de final edulcorado.
Lo cierto es que una vez abrí el libro y acaricié sus suaves páginas, di por hecho que me iba a encantar; sin embargo, a medida que fui leyendo comprendí que era uno de tantos libros que actualmente llenan las estanterías de las tiendas de regalos y objetos curiosos. Libros que, tras un título llamativo, no esconden una historia fascinante o simplemente entretenida, sino un conjunto de imágenes intrascendentes- bien trabajadas, eso sí- completamente gratuitas y banales, por no hablar del inexistente hilo argumental. Seguramente el regalo perfecto cuando no se sabe qué regalar.
El libro en cuestión enseña a ser una mujer borde, impaciente y constantemente insatisfecha que, sin embargo, gracias a la posesión de una carísima chaqueta de cuero que combina con unos vaqueros rotos y un peinado desenfadado se enfrenta al mundo mostrando una imagen de chica dura a la que todo le es indiferente. Entre las muchas cosas que me llamaron la atención se encuentran consejos como " Always be fuckable " y " you should always smoke ", unas indicaciones muy “inteligentes” y “valiosas” para sobrevivir en una sociedad tan superflua como es la nuestra y tan dada a cosificar a la mujer, claro está.
(Puestos a poner el dedo en la llaga, ¿Acaso las cuatro amigas autoras fuman como carreteros y siempre están predispuestas al revolcón?)
Me pregunto si realmente alguna parisina se siente identificada con el prototipo de mujer que plantea el libro. También me pregunto cómo sería la guía para ser "una auténtica españolita everywhere you go". ¿Alguien que hace botellón, muere por una paella y es adicta a Zara? ¿Alguien que se engancha a Gran Hermano y desprecia los programas de la dos? ¿Alguien que “pasa” de política pero confiesa su intención de votar a Podemos? Lo cierto es que cada mujer tiene su forma de ser y pensar y que no se nos puede etiquetar o estereotipar gratuitamente. Está claro que el error fue mío por juzgar un libro por la portada, por dejarme seducir por unas imágenes-cebo con las que algún experto en marketing decidió compensar su nulo valor literario.
