Rey de Nuevo Cuño
Cristina Casaoliva
Durante 365 días albergamos esperanzas y especulamos. Jugamos a las adivinanzas y hacemos pronósticos. Sacamos deducciones, aseveramos orgullosos, susurramos temerosos y soñamos despiertos.
En épocas de bonanza apostillamos el refrán -¨virgencita, virgencita que me quede como estoy¨.
Y es que con ganas o sin ellas, con sonrisas o entre lágrimas, inexorablemente, siempre llega un nuevo año.
Ya está aquí un flamante o no 2015. No tengo la sensación de que las cosas anden por derroteros muy distintos de los andados en el pasado 2014 que empieza a difuminarse en el horizonte, pero puedo estar equivocada, no sería la primera vez. Este año nuevo lo empiezo socialmente hablando, expectante, en estado de alerta, en modo comando. En realidad algo reticente, puede que los datos recopilados durante el 2014 resulten agobiantemente funestos y nada esperanzadores.
Así pues estrenamos año, posibilidades de cambios políticos y previsibles resultados históricos en las votaciones encabezados por Pablo Iglesias y Oriol Junqueras, un arraigado y profundo sentimiento Independentista que promete cambios y retoma andadura lleno de fuerza y un rey de nuevo cuño que estrena discurso, un discurso con intenciones o casi pero a la postre vacuo y sin soluciones, sin promesas de mejora, ni propuestas de cambio.
De entre las muchas madejas que desmadejar me apetece empezar por la monarquía rancia, por puro sentimiento de antipatía hacia la institución, declarado abiertamente en no pocas ocasiones.
Así analizando el discurso de su ilustrísima desde su comienzo, me encuentro con que la dureza y duración de la crisis según su majestad, -¨produce en muchas familias incertidumbre por su futuro¨. Señor rey no produce incertidumbre, produce pavor, horror, incredulidad, indignación y cabreo. Lo de incertidumbre es una visión licuada y almibarada alejada de la realidad. Claro que alejado de ella es donde usted habita.
Decir que algunos de nuestros problemas políticos generan inquietudes es quedarse corto.
Tan orgulloso y pagado de sí mismo continua leyendo su discurso por encargo, para decirnos, cual maestro adoctrinando a sus alumnos, que¨ no debemos dejarnos vencer por el pesimismo, el malestar social o el desánimo¨ entiendo lo que dice pero es que resulta mucho más sencillo ser optimista, con una paga vitalicia. Sentado en el despacho de su casa millonaria es más sencillo no dejarse vencer por el malestar social, sobre todo cuando la máxima proximidad con la sociedad a la dice representar es el mínimo contacto con el personal de su servicio doméstico y es evidente que el desánimo pasa de largo ante las fastuosas celebraciones que preside faltas de escasez.
Con todo, continua y apostilla que debemos ¨afrontar con firmeza y eficacia las causas de esos problemas, resolverlos y recuperar el sosiego…¨ .
Ah Bueno!, que tenemos que resolverlos!, caray no se nos había ocurrido suerte que le tenemos a él ejerciendo de apuntador!!. Y la meta de resolverlos no es otra que recuperar el sosiego, lo dice por qué es sabido que vive en un estado de inquietud permanente, en un sin vivir de padecimiento por el pueblo, entre langostino y langosta, entre copa de bourbon y de jerez padece lo indecible y sabe cuan ansiado es el sosiego cuando se ha perdido.
Y voy a obviar lo de sociedad democrática, por no hacerme repetitiva.
Hablando de la corrupción Felipe VI, van a permitir que omita el Don, cataloga los delitos de corrupción como conductas irregulares y considera al contrario que el resto de ciudadanos, que los responsables están respondiendo de ellas.
Fíjate por donde, que suavidad en la descripción y cuanta benevolencia, se nota que la familia anda metida en el meollo y la sangre tira, aunque si temiera que las fechorías de Borbon&Company acabaran con el chollo que le hace vivir a cuerpo de rey igual endurecía el discurso, pero ya se sabe que en España nunca pasa nada, al menos a según quién.
Para seguir cubriéndose de gloria en su estreno, aborda la situación en Catalunya indicando que la constitución que se creó con intención de que fuera provisional y sufriera amplias modificaciones a lo largo del proceso, cosa que no ha sucedido, la misma que se firmó el pasado siglo, en el anterior milenio, estaba perfecta tal y como está. Reconozco que me sorprendió escuchar cómo decía que lo que le preocupa con respecto a una posible independencia de Catalunya no era la economía sino que se puedan producir fracturas emocionales, desafectos o rechazos. Vaya por Dios!!, eso es lo que le preocupa, en primer lugar y con todos mis respetos, eso no se lo cree nadie y en segundo lugar, ya hay desafectos y fracturas. De todos modos como decía al principio no aporta soluciones ni propuestas, como era de esperar.
En la España de hoy hay muchos adversarios, no de Catalunya exclusivamente sino del pueblo, a mi modo de ver, el Partido Popular al completo, los miembros de la monarquía y sus adeptos, los cargos públicos que roban, una constitución anquilosada y no evolutiva y unas leyes obsoletas y añejas lo son, pero claro estos mismos sirven a sus objetivos así que para el nuevo rey en la España actual no hay adversarios, de nuevo pues se evidencia que en la residencia real vive de espaldas al pueblo y a la actualidad.
Por no alargarme, el nuevo discurso no ha sido nada nuevo, más bien ha sido una flagrante estafa, una decepción esperada de una institución inservible que estrenan año, junto a nuevas incógnitas, como el verdadero programa si lo hay de Podemos y sino esconde una meta claramente comunista y también llena de escaseces o si este país democrático hallará el modo de dar voz al pueblo catalán.
Seguiremos hablando, tenemos todo un año.