¿Quién no ha anhelado tener fama, éxito, poder, lujo... aunque para ello tenga que vender su alma al diablo? ¿Quién no ha sido tentado alguna vez a saborear sus tres minutos de gloria? Y es que a veces el éxito es un elixir demasiado embriagador para no caer en una segunda copa. Su veneno entonces se convierte en irresistible. Precisamente de este veneno-trampa habla el último libro de uno de los escritores más leídos del mundo.
Es bien sabido que uno de los temas recurrentes de Paulo Coelho es la importancia del precio que hay que pagar para conseguir hacer realidad nuestros sueños. Pero esta vez el autor de "El alquimista" va más allá y en "El vencedor está solo", su última novela, se nos plantea además el hecho de hasta qué punto se pueden manipular esos sueños. Afirma Coelho que "a lo largo de las últimas décadas hemos vivido inmersos en una cultura en la que priman la fama, el dinero y el poder. Y la mayoría de la gente se ha visto inducida a creer que son ésos los únicos valores que merece la pena poseer, ignorantes de que los verdaderos manipuladores en la sombra permanecen anónimos. Dichos manipuladores creen que el poder más eficaz es el que pasa desapercibido, hasta que es demasiado tarde y caemos en la trampa". Con este libro Coelho explora cómo se pueden manipular los sueños y cómo las personas pueden quedar destruidas en ese proceso despojándose de sí mismas.
Porque para vencer hay que estar dispuesto primero a perder, a renunciar, a claudicar, a humillarse hasta el punto de quedarse solo sin ni siquiera la compañía de tu propia identidad. El vencedor, completamente solo.
La alfombra roja
Toda la historia sucede en un día y en el Festival de Cannes, un lugar lleno de fama y de glamour pero salpicado de incógnitas sin descifrar. Un lugar que se convierte en un reflejo de lo que podría pasar en cualquier lugar del mundo habitado por el ser humano.
Durante 24 horas seguiremos los pasos del protagonista, Igor, un empresario ruso magnate de las comunicaciones destrozado por una dolorosa ruptura matrimonial, y conoceremos su delirante plan para recuperar a su ex mujer. En su camino se cruzarán una joven y ambiciosa actriz, una modelo de Ruanda exiliada en Europa, un productor influyente y corrupto y un estilista que pagó un alto precio para estar en la cima de la gloria. Todos ellos, sin apenas saberlo, cambiarán sus destinos al cruzarse en el plan de Igor. Coelho disecciona con gotas de clarividencia los paraísos del lujo y el glamour desde una labor de documentación intensa. Historias que normalmente se quedan en la superficie son tratadas desde su vertiente más cruda: como una droga que destruye y crea dependencia.
El escritor ha querido aclarar que "El vencedor está solo", aunque se distancia de su línea más mística para adentrarse en los entresijos de los misteriosos enigmas, "no tiene nada que ver con el género policíaco, tan de moda en los últimos meses con la trilogía de Larsson". La última novela de Coelho retoma de alguna manera los grandes temas de "Once minutos" o "El Zahir", en que la búsqueda del éxito y el lujo ahoga los susurros del corazón.